Los intraterrestres.
Cada día me
enfrento a lo desconocido: La gente.
Siempre he
pensado que hay vida en otros planetas, sé
que cada uno de nosotros hemos pensado alguna vez de una u otra persona y hasta
de familiares ¿de qué planeta habrá salido?
Pero al tratar con personas diversas a diario he
descubierto una nueva especie: Los
intraterrestres
Están en
todas partes, puede que tu vecino, amigos. Todos, pensé mil cosas, pero la explicación
más factible, una nueva raza de gente, diversa, entre malas, buenas, locas,
tontos, los que se hacen, los que son, los forever alone que salen a la calle a
desquitar su mal genio y su soledad, los viejitos que salen a buscar nietos
postizos, los que te dicen primo/prima, ni tienen uno de tus apellidos y tampoco los has visto en tu vida, los que solo quieren hacerte
“una preguntita” y después de escuchar 5 minutos de esa “preguntita” la satisfacción que da
responderle en un nano segundo: NO!
Gente que
sin proponérselo activan tus instintos asesinos, imaginar que bellas se verían mis
manos alrededor de su cuello, apretando, apretando…
¿Cómo se vería
mi lápiz en su ojo? o mejor aún, ¿de qué lado le quedaría mejor incrustada la grapadora en la cabeza?
Pero desecho
esos pensamientos.
Cada día me
preparo, me pongo los guantes imaginarios del don de la palabra, el ring o cuadrilátero: La vida, cada día es una oportunidad de conocer un
personaje nuevo, un intraterrestre , salen con cada cosa que solo son posibles en su mundo, también tenemos
intraterrestres que te inspiran a creer que es posible vivir sin
complicaciones, sin tanto drama, sin tanta negatividad, pero estas son parte de
nuestro mundo, así como lo es amar y odiar.
Muchas
veces la empatía no es suficiente, gracias a Dios por el sentido común, y
mantenerme positiva, sonriente, siempre servicial…hasta el próximo cliente. 5, 4, 3, 2, 1…